miércoles, 19 de septiembre de 2012

Barranquismo por los Álpes Marítimos (Francia)

08-2012

El primer tercio del mes de agosto estuvimos haciendo barrancos por los Álpes Marítimos franceses, tiempo soleado y un buen número de descensos entre los que elegir, la mayoría de gran interés. Los barrancos están agrupados en varias cuencas pre-alpinas; nuestro primer contacto fue el río Verdón, acampando cerca del pantano que recoge sus aguas tras recorrer el gran cañón que forma el mismo. Los afluentes del Verdón estaban secos, pero bajamos el Ravin Ma Morte, ya que nos dijeron en la oficina de turismo que había un escape en los últimos rápeles. Este barranco suele estar seco, su último tramo desemboca en el Verdón de forma espectacular. Si se baja hasta el río luego tienes dos opciones: seguir corriente abajo hasta salir por el pantano, siendo este un recorrido bastante largo; o retornar corriente arriba y tomar una senda balizada que enlaza con la de escape del Ravin Ma Morte. Esta última opción conviene confirmarla antes de retirar la cuerda del último rápel; de subida, nosotros nos equivocamos y bajamos por este sendero que llevaba al río. Por lo demás, el descenso es interesante y técnico, con numerosos rápeles equipados con cuerda fija y varias tirolinas instaladas para superar badinas de aguas estancadas. En uno de los últimos rápeles, a la izquierda vemos unas cuerdas fijas que nos permiten salir del cauce camino de la carretera. Tras unos metros de subida, la instalación se divide en dos: una parte más aérea que nos permite ver de forma privilegiada la salida al Verdón y otra menos acrobática que sube por el bosque; al poco se juntan las dos opciones. Sigue un tramo de senda y luego seguimos otra parte vertical asegurada por cuerdas que nos sitúa a escasos metros de la carretera, cerca de donde se deja el vehículo.

Tirolina en Ravin Ma Morte

 La jornada siguiente nos decidimos por el l´artuby que según indicaba una guía era muy acuático; paramos a preguntar a los bomberos de un puesto antes de llegar al puente donde se deja el coche para iniciar la aproximación; nos dijeron que estaba seco, y que dicha circunstancia hacía el descenso problemático y escaso de interés. Nos aconsejaron bajar el Verdón por su cauce y retornar a la carretera por una senda preparada antes de una zona con rebufos peligrosos. Unos metros antes del puesto de socorro, parte el camino que baja hasta el cauce y por el que se puede ir paralelo al río hasta la parte final, cercana al rebufo; ahí el Verdón se oculta en una cueva donde el río en encaja velozmente; para acceder a esta zona hay que evitar un sifón al que nos dirige la corriente del Verdón y que sorteamos mediante un salto o destrepe de una roca a la derecha del sifón. Tras la cueva podemos retornar por otro camino o remontar la corriente de la cueva. Después tomaremos la senda que nos sube hasta la carretera; si tenemos dos coches, se habrá dejado uno ahí, sino caminamos varios kilómetros hasta alcanzar el aparcamiento del puesto de socorro, unos 40 minutos. La actividad en su conjunto es interesante; la bajada del Verdón se hace bien con un caudal apropiado y tiene zonas bonitas y divertidas. A la hora de realizar este descenso hay que tener en cuenta que no se puede hacer todos los días; varios días de la semana se realizaban sueltas de agua, por lo que si nos decidimos a bajarlo, habrá que consultar los días que es posible. 

El Verdón

Además del descenso del Verdón, nos aconsejaron visitar, entre otros, el barranco de Riolan, al que nos encaminamos como objetivo para el día siguiente. El consejo general de la gente con la que hablamos era que no dejásemos de visitar este descenso, bonito y acuático. Por la mañana, coincidimos en el aparcamiento superior con varios grupos, la mayoría de empresas. La actividad es obligada si se viene por estos lugares; lo dicho, no excesivamente complejo, bonito, acuático y divertido. Para la vuelta sólo contábamos con un coche, así que regresamos por la carretera hasta tomar un camino GR que salía a la izquierda y que nos subía al pueblo de Sigale y de ahí al punto de partida; si estáis en la misma situación, dejar el coche en la salida; madrugar y hacer el pateo de retorno a primera hora, vale la pena para no sufrir el calor a partir de medio día. El siguiente fue el Aiglún, también de los más bonitos de la zona; muy acuático. Si no se dispone de dos vehículos, realizar el pateo de retorno a primera hora sin falta; en las guías viene un pateo de vuelta, que hicimos; el asunto es que en ninguna de las guías está correcto el tiempo, es largo y duro.

Aiglún

Nos trasladamos algo más arriba, por la zona que rodea la localidad de Guillaumes; a la entrada del pueblo hay un puesto de bomberos, donde preguntamos acerca de los barrancos que teníamos previsto realizar: posibles prohibiciones y recomendaciones. El consejo general era salir de todos no más tarde del mediodía, ya que el riesgo de tormenta es serio. La intención era hacer la Clue de Amén y algún otro. La Clue de Amén no se puede hacer todos los días; al día siguiente tocaba, pero las previsiones daban riesgo de tormenta y al siguiente día no se podía hacer; optamos por la prudencia e hicimos el camino de aproximación a la cabecera del barranco. Al siguiente día fuimos al Challandre; el principio es soso, andando durante un rato de un lado a otro del río; luego se encadenan los rápeles hasta el final, encajados en un entorno de gran belleza.

El día anterior coincidimos con un grupo francés, en el aparcamiento de aproximación de la Clue de Amén; entre la charla, surgió el nombre de la Clue du Ratón, otro de los descensos emblemáticos de por aquí. El problema para hacerlo es que, en principio, parecía necesario disponer de dos coches. Nos comentaron que se podía hacer con uno; el coche se dejaba en la salida del barranco y a unos doscientos metros subiendo la carretera se podía coger un camino que llevaba para la cabecera. Muy amablemente, nos dejaron una copia del mapa que iban a usar para ir al día siguiente al Ratón. Después de hacer el Chalandre, buscamos la aproximación que nos comentaron. La encontramos e hicimos buena parte; el principio es muy empinado y duro, pero nos puede llevar a la pista que lleva a la cabecera en algo menos de dos horas. El camino viene en los mapas topográficos de la zona o se puede visualizar en la web cartográfica francesa de Geoportail. Al final no pudimos hacer el Ratón, pero ahí dejamos el apunte por si le sirve a alguien. Recordar que este cañón es especialmente sensible a las tormentas (nos comentaron que ha habido numerosos muertos por crecidas); por lo que hay que estar muy atentos a la climatología y salir antes de las 17h. como máximo.

Clue de Amén

 El último día bajamos la Clue de Amén; para hacerlo hay un par de opciones: realizar la aproximación habitual, de cerca de un par de horas y bajarlo entero, con lo que la actividad nos llevaría cerca de las 8 horas; otra posibilidad que nos comentaron unos compañeros que la acaban de hacer y con los que conversamos en el aparcamiento del mirador del barranco, era remontar la pedrera que hay al lado de las cascadas finales y que en 10 minutos te lleva a uno de los últimos escapes. Aquí podemos tomar la parte final del barranco, quedando buena parte de los últimos rápeles y realizando la actividad en un par de horas sin apenas aproximación. Nos comentaron que era el tramo más interesante y que la sección superior era de menor interés.

Para no tener que madrugar en exceso, salir a medio día y evitar la aproximación tan larga con el material, optamos por hacerles caso y realizamos el barranco como nos aconsejaron. Ves la parte más interesante y la disfrutas sin prisas.

Por esta temporada no hubo tiempo para más, intentaremos terminar de conocer más descensos en próximas vacaciones.

Notas
  •  Buena parte de las aproximaciones estaban bien señaladas con carteles.
  • En las oficinas de turismo puedes solicitar de forma gratuita el libro con los barrancos de los Alpes Marítimos; también tienen otras guías gratuitas sobre senderismo, ferratas, btt, etc... la única pega de la guía de barrancos es que no tiene las topos.
  • Las guías, incluida la de barrancos, te las puedes descargar por internet de forma gratuita en la url http://asp.webpublication.fr/v2/index.jsp?id=105%2F99%2F232&lng=fr
  • Aparte de la guía de la zona, nosotros llevamos la "30 plus beaux canyons alpes du sud"; en general estaba bien, aunque algunas cosas estaban ya anticuadas.
  • Web Geoportail, para obtener cartografía de la zona
José Mari Rey García

No hay comentarios:

Publicar un comentario